First of all, I would like to emphasize that when we host Vision Trips from donors or Plant With Purpose staff in Mexico, both the local program team and the participating families feel grateful for the support they’ve given for more than twenty years. Not only are they funding the program and projects, but they are collaborating and praying for the development of our shared vision. These contributions improve the quality of life of groups and communities living in conditions of poverty.
Through the Vision Trips to the communities, visitors can learn about the context of our work with participants in Mexico, witness the application of resources, as well as the results our impact achieved.
Through these Vision Trips, our inter-institutional relationship is strengthened since we are able to exchange experiences, share expectations and challenges, and spend time together as brothers and sisters.
We value visitors’ willingness to take time to learn about our local context, as well as to experience the conditions and lifestyles of the participating families. In this way, visitors can observe first-hand the challenges farmers face and personally meet the people we are collaborating with in this sustainable development process.
The participating families feel important and motivated by these visits. Because of the relationship of trust that is built with visitors, farmers can freely share what they have learned, as well as the benefits of carrying out their projects. When the visiting groups get involved or share some activities with them, farmers also feel valued and recognize the effort of collaboration and support.
In 2019, the new Peñoles watershed began to be explored and a local church received a group of visiting women from the U.S. coordinated by Cathi Lundy (long-time board member and friend of Plant With Purpose), for the first time. The groups took part in different activities with participating families like a Bible study/reflection, a handicraft workshop for adults and children, and the local team did a demonstrative planting of fruit trees. The community participants were very motivated and grateful for the group's visit. Leaders from other communities in the watershed participated in these activities also, and after, they showed their interest and willingness for the local team of Misión Integral to visit them. This led to the opening of new communities in the Peñoles watershed where a process of development began with workshops on the topic of “stewardship of creation.”
On the other hand Isabel, a farmer in Nuxiño, has expressed the following about the visiting groups: “It has been a very beautiful experience because we were able to interact with the Plant With Purpose supporters. We feel that we are valuable to other people who are not from our culture. And that we can coexist with them ...”
I believe that all of us who share love for this cause for those in need can feel part of the same family. As the apostle Paul says, although with different functions, all of us are members of one body in Christ Jesus, fulfilling God's purpose in our lives, serving others.
Your Brother in Christ,
Luis Alberto Castellanos
"Beneficios de las visitas de donantes y del personal de EE.UU. a los equipos locales y a las familias participantes."
En primer lugar, quisiera destacar que cuando recibimos en México la visita de donantes o del personal de Plant With Purpose, tanto el equipo local del programa como las familias participantes, nos sentimos agradecidos por el apoyo otorgado durante más de veinte años, no solo por el financiamiento al programa y proyectos, sino por su colaboración y oraciones para el desarrollo de nuestra Visión compartida, la cual contribuye a mejorar la calidad de vida de grupos y comunidades en situación de pobreza.
A través de los recorridos a las comunidades, los visitantes pueden conocer el contexto de nuestro trabajo en México y verificar de manera directa con los participantes, la aplicación de los recursos, así como los resultados obtenidos y el impacto logrado.
Con estas visitas se fortalece la relación interinstitucional, ya que podemos intercambiar experiencias, compartir expectativas y desafíos; conocernos más y tener un tiempo de convivencia fraternal.
Valoramos la disposición y tiempo de los visitantes para conocer el contexto local, así como experimentar las condiciones y modos de vida de las familias participantes. Pues, de esta manera pueden observar de primera mano los retos que ellas enfrentan y también pueden conocer los rostros de las personas a quienes se apoya y con quienes colaboramos en un proceso de desarrollo sostenible.
Las familias participantes se sienten motivadas e importantes. Pues, con la relación de confianza que se construye con ellos, pueden compartir con libertad lo que han aprendido, así como los beneficios que les otorga la realización de sus proyectos y cuando los grupos visitantes se involucran o comparten algunas actividades con ellas, también se sienten valoradas y reconocen ese esfuerzo de colaboración y apoyo.
Me gustaría compartir que, en el año de 2019, se empezó a explorar la nueva subcuenca Peñoles y una iglesia local recibió por primera vez al grupo de mujeres visitantes de EE.UU. coordinado por Cathi Lundy, quienes compartieron diferentes actividades, como: reflexiones bíblicas, un taller de manualidades para adultos y niños, y el equipo local hizo una plantación demostrativa de árboles frutales. Los participantes de la comunidad se sintieron muy motivados y agradecidos por la visita del grupo y debido a que en estas actividades participaron líderes de otras comunidades de dicha subcuenca, mostraron su interés y disposición para que el equipo local los visitara, por lo cual se aperturaron nuevas comunidades en donde se inició un proceso de desarrollo con talleres de mayordomía de la creación.
Por otra parte, Isabel Pérez de Nuxiño ha expresado lo siguiente acerca de los grupos visitantes: “Ha sido una experiencia muy bonita porque pudimos interactuar con ellos. Sentimos que somos valiosos ante otras personas que no son de nuestra cultura. Y que podemos convivir con ellos…”
Creo que todos los actores que compartimos esta causa por los más necesitados, podemos sentirnos parte de una misma familia. Como dice el apóstol Pablo, aunque con diferente función, pero todos miembros de un solo cuerpo en Cristo Jesús, cumpliendo el propósito de Dios en nuestras vidas, sirviendo a los demás.
Fraternalmente.
Luis Alberto Castellanos